Dama y caballero se encuentra a altas horas de una decimonónica noche primaveral en un puente iluminado por la tenue luz de una farola, que súbitamente los sorprende en su intento paralelo de adentrarse en el abismo de las frías aguas de un caudaloso río. ¿Qué les ha conducido a tan fatal destino?

En el contexto de la «nueva realidad» que ambos viven y en el transcurso de esta sátira, reflejo y remedo en la distancia de los tiempos inciertos y convulsos que vivimos, se desenredan los temas candentes que acompañan el devenir de la existencia de estas dos almas fugitivas, se desvelan los secretos y las media verdades, los miedos, los deseos y los sueños que sostenían la simétrica asimetría de sus vidas, que por caminos distintos les han llevado a una misma, trágica e irrevocable decisión. ¿Irrevocable…? ¡Cuidado! ¡Alguien se acerca…!

Cuando la terca niebla pierde su fuerza, se abren a la vista las centelleantes aguas que baña la media luna embelesada por el lejano canto de las sirenas de los barcos y se distingue la silueta de dos seres perdidos en un inesperado encuentro…, pues no hay nada que el amor no pueda vencer, salvo quizás… al enemigo invisible.